- Área: 1551 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Pablo García Figueroa
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El hotel Sanará es un centro de sanación conformado por espacios donde ocurren diversas actividades enfocadas al bienestar y relajación, así como 22 habitaciones frente al mar turquesa del caribe mexicano.
El concepto de diseño se basa en una metáfora de la relación de lo urbano con lo natural, como lo harían los huéspedes a su visita a sanara; con la formalidad de una ciudad pero con un entorno de tranquilidad, puro y virgen. El enfoque inicial fue dejar que el sitio mande sobre los edificios, por ende, todo está elevado del suelo permitiendo que el paso del viento, tortugas marinas y fuertes corrientes de mar fluyan a través del terreno, según los ciclos climáticos.
El Wellness Center está ubicado en el corazón del proyecto, envuelto de todo lo demás que sucede a su alrededor. Por ende, es este edificio el personaje principal del que se desglosa la composición de los espacios, pues era un edificio existente en medio de todo el predio. Este espacio se centra en sanación física, mental, emocional, espiritual u holística. Contando con diversidad salas de masajes y tratamientos, así como lugares de relajación para apreciar las mejores vistas desde la parte más alta de la propiedad.
El salón de yoga se concentra en permitir prácticas de diferentes índoles, desde actividades físicas y meditación, hasta conciertos de sanación, talleres y eventos particulares, todo esto con el contacto visual con la playa y el mar de Tulum. Las habitaciones son una variación de planos entre los tamarindos, plums, y las lujosas apples.
Una de las principales características de estos espacios es contar con un patio trasero donde se ubica un jardín privado y una tina para relajación, al igual que al frente con una terraza de acceso y vista al mar. Se propusieron constantes aportaciones de materiales vernáculos, tales como la piedra, la madera y algunos elementos locales como lámparas de bejuco, barandales de cuerda y celosía de barro.
La mayoría de los muros interiores tienen acabado de cemento blanco pulido, el cual le da una esencia de sobriedad y elegancia a la vivencia de los espacios interiores. La fusión entre estos materiales y el juego de concretos texturizados, lograron aterrizar el concepto metafórico de cuando lo urbano se vincula en lo natural.